5 de agosto de 2009

Cuando estoy vacío


Mientras algo nuevo había nacido en el interior de Marcelo, mi interior continuaba inerte, muerto.

Sólo me sentía un envase vacío que había perdido su fragancia y ni siquiera podía saber cuál era, si olía a rosas, a lavanda, a cuero, a bosque, a bebé o por el contrario a podredumbre, a descomposición, a quemado, a mierda.

En definitiva, tenía que encontrar un nuevo aroma para mi cuerpo, partiendo de la nada, sin orientación alguna.

Debía sepultar la negrura de mi interior para poder así comenzar a llenarlo con imágenes, sonidos, olores, gustos, sensaciones.

Pero si bien el abanico de posibilidades era casi infinito y podía moldear mi nuevo perfume humano jugando a ser Jean Baptiste Grenouille, la falta de memoria sensorial me impedía hacerlo inmediatamente.


Era como un recién nacido que comenzaba a conocer los olores sin asociarlos a ningún concepto específico.

Así debía primero registrar mi alrededor, primero limitado a las paredes que me rodeaban y luego ir saliendo lentamente al nuevo mundo.



Banda de sonido: Cuando estoy vacío - Juana la Loca

4 comentarios:

  1. Es imposible entender la dimensión de lo que sentías en ese momento, simplemente no cabe en mi cabeza, aunque eso ya le da una magnitud importante.
    ¿No te acordabas de nada? ¿O tenías las "básicas"?

    Beso grande, siempre es un placer leerte! :)

    ResponderEliminar
  2. Querida Madie, (única valiente que se anima a comentar!!!), espero que tu inquietud se vaya aclarando con el correr de los posts, pero te anticipo que tenía las básicas de la vida (o sea, los conocimientos generales del mundo) pero nada, absolutamente nada de mi propia vida...
    Besos!!

    ResponderEliminar
  3. Buena referencia! Me encantó ese libro, sobre todo la escena donde el descubre que no tiene ningun olor y decide hacerse uno


    Besos

    D

    ResponderEliminar
  4. Como le pasa a Madie, ni siquiera me sale imaginarme en esa situación.
    Leí este tipo de historias en más de una ocasión, pero saber que en este caso es cierto le da una dimensión inabarcable.

    Seguiré avanzando en la historia, pero el simple hecho de saber que años después podés escribir tu historia, ya es una gran noticia.

    ResponderEliminar